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La gobernadora del Estado de Puebla, Martha Érika Alonso, y su esposo, el exgobernador y hoy senador del PAN Rafael Moreno Valle, quien impulsó una transformación turística sin igual en el destino mexicano, han muerto este lunes por la tarde en un accidente de helicóptero del que aún se desconocen las causas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó los decesos poco después de las cinco y media hora local y anunció la apertura de una investigación sobre las circunstancias en las que se ha producido el siniestro ocurrido en las proximidades del aeropuerto internacional de Puebla, entre los municipios de Santa Maria Coronango y Tlaltenango.
«Cuando el helicóptero se encontraba en vuelo, a tres millas del aeropuerto, sufrió una aparente falla, aún sin especificar, que ocasionó que se precipitara sobre el terreno», ha subrayado el secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, sobre en la aeronave viajaban además de ambos políticos, los dos pilotos y, «presumiblemente», un quinto ocupante.
Puebla es, con algo más de seis millones de residentes, uno de los Estados con más habitantes de México, y su capital, Puebla de Zaragoza, es la tercera ciudad más grande del país. Martha Érika Alonso, de 45 años, acababa de convertirse en gobernadora de Puebla, cargo en el que había tomado posesión hace solo 10 días (Puebla dobla turistas al Estado desde llegada de actual gobernador).
Su esposo, Rafael Moreno Valle, tenía 50 años y era coordinador del PAN en el Senado y una de las figuras más relevantes del partido mayor partido conservador de México. Antes de entrar en política, Moreno Valle, doctor en Derecho por la Universidad de Boston, había sido subtesorero para América Latina de Desdner Bank alemán.
Toda su carrera como cargo público estuvo centrada en Puebla. Primero, como secretario de Finanzas y Desarrollo Social, puesto que ocupó de 1999 a 2003. Después, como diputado federal y local bajo las siglas del Partido Revolucionario Institucional (PRI). En 2006 llegó al Senado, ya con el PAN, y entre 2011 y 2017 fue gobernador del Estado.
Bajo su liderazgo, el estado de Puebla registró en los últimos años una transformación centrada en el desarrollo turístico que le ha permitido, solo ese periodo, multiplicar todos sus parámetros turísticos y convertirse en ejemplo para todo América Latina e incluso el mundo de que cómo con decidida voluntad política de darle prioridad y transversalidad a esta industria se genera más riqueza que de ninguna otra forma para sus ciudadanos, al tiempo que se asegura su futuro económico, como reveló REPORTUR.mx (Cómo un destino puede doblar en tres años sus estadísticas turísticas).
Moreno Valle dio carta blanca al dueño de la mayorista Petra, Roberto Trauwitz, para que desarrollase y aplicase un plan turístico en el que se liberase todo el potencial que tenía el estado, potencial que de igual forma que en mayor o menor medida también el resto de destinos de México.
La transformación fulgurante experimentada por el destino se justifica en la inversión en su producto de aventuras y el cultural, así como en el segmento MICE, con la construcción y reformas de enormes auditorios que la han situado en este poco tiempo en una de las referencias del turismo de reuniones en todo el continente americano.
En paralelo a todo ello, y además de un ambicioso plan de marketing con presencia propia en la mayoría de ferias mundiales punteras –liderada en muchas ocasiones por el subsecretario de Turismo Ignacio de Pablo–, las infraestructuras y la ciudad se han remozado hasta dar una imagen de ciudad en plena vanguardia arquitectónica y pulcramente limpia, a lo que hay que unir que en toda la provincia ya suma 7 de los conocidos como ‘pueblos mágicos’, de los poco más de 100 que hay en todo México, y cuyo reconocimiento atribuye el Gobierno Federal.
