El consejero delegado de HBX (dueña de Hotelbeds), Nicolas Huss, considera «difícil» anotarse beneficio neto este año por los costes asociados a la salida a Bolsa y la refinanciación de la deuda de la que vino aparejada, que han supuesto un cargo extraordinario de 55 millones de euros, según revela a Expansión.
HBX, que cumple tres semanas como cotizada, espera retomar niveles con los que inició su andadura bursátil en el parqué el pasado 13 de febrero, a 11,5 euros por acción, luego de que este miércoles cerrase la sesión rozando los 11 euros, mientras Huss asegura a El Economista que «contemplamos ampliar el capital flotante, pero es una perspectiva a medio plazo».
Huss asegura que HBX incrementará sus ingresos brutos a ritmos del 10-16% anual durante los próximos tres ejercicios, más del doble que el mercado turístico, «que crece un 5% o 6% cada año», y declara a Cinco Días que “hay margen para crecer. Solo vendemos el 2% del mercado mundial de habitaciones de hotel”.
El negocio principal de HBX como banco de camas representa actualmente el 88% de la facturación, pero el plan de Huss es que pierda peso en los próximos años «hasta alcanzar el 65% o el 75% en un plazo de cinco años» diversificando el negocio con el crecimiento de otros servicios complementarios como movilidad, experiencias, pagos y seguros.
Asimismo, se refiere a la expansión en nuevos mercados, como Japón, o con alianzas con Turkish Airlines y Saudi Airlines, así como «también en India donde necesitamos desarrollar nuestra red hotelera», una vez proyecta optimismo luego del debut en Bolsa del que informó REPORTUR.mx (Hotelbeds pierde el 4% al debutar en Bolsa pese a descuentos previos).