Los taxistas pertenecientes a una de las cinco empresas de transporte autorizadas para operar en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) reportaron que sus ganancias han caído hasta 50 por ciento, debido al incremento en el costo de la gasolina, obstáculo que se agregó este año al problema de la competencia desleal, de servicios como Uber y Cabify, que operan sin regulación.
De acuerdo con los datos que ofrecieron los operadores, el costo por llenar el tanque de un vehículo sedán para cuatro pasajeros, pasó de 800 a mil pesos en promedio, mientras que para una vagoneta, con capacidad para ocho pasajeros, el costo se elevó de los mil 600 a dos mil pesos, por un tanque de 120 litros.
Por el momento, no se han considerado incrementos en las tarifas que cobran los taxistas a los usuarios, con el fin de no afectar más su economía, sin embargo la situación se está volviendo compleja, pues las transportistas están absorbiendo el costo, lo que se refleja en su merma de ganancias, como lo comentó Carlos Tepale, presidente del grupo Nueva Imagen. «Solicitamos que el gobierno federal, diputados y senadores analicen el aumento a los precios de los combustibles porque están afectando a la población en general, no sólo al gremio taxista, sino a los más vulnerables”.
Tepale dijo que esperarán hasta ver cómo se comporta el mercado interno, antes de hacer ajustes a las tarifas. Se trata de un problema grave, aunado al que ya sostienen por la operación de Uber y otras empresas de economía colaborativa de aplicación, “que han entrado indiscriminadamente a prestar el servicio dentro del aeropuerto capitalino sin permiso o concesión”, comentó Hugo Guerreo, de Nueva Imagen. (Aplicaciones móviles vs taxis tradicionales en aeropuertos).