La presidenta de la Asociación Mexicana de Turismo Accesible e Inclusivo (AMEXTI), Claudia Peralta Antiga, comentó para REPORTUR.mx que se ha acercado a la Secretaría de Economía y de Turismo Federal para la creación de una Norma Oficial Mexicana (NOM) que regule y legisle el turismo inclusivo en México.
Por el momento, la AMEXTI, de la mano con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, están trabajando los borradores de dicha ley, luego de que en la pasada edición del Tianguis Turístico en Guadalajara se mostrara un gran interés por el nicho por parte de autoridades, agentes y otros prestadores de servicios turísticos, por lo que la presidenta de la asociación busca dar pasos firmes con el fin de garantizar que los discapacitados disfruten de manera segura y sin riesgo de los destinos turísticos del país.
Por ahora, sólo existe, desde noviembre de 2014, el Distintivo de Inclusión Turística, con el que Sectur reconoce a los prestadores de servicio que incorporan medidas de accesibilidad para los turistas en situación de discapacidad, sin embargo, aún quedan huecos pendientes para que este sector pueda gozar plenamente de las garantías del viajero tradicional.
Peralta Antiga es gerente de la agencia de viajes “Viaja con Tlachtli”, la primera en manejar el turismo receptivo para personas con discapacidad, quien trabaja en las cuatro regiones del estado de San Luis Potosí.
Destacó que este segmento de mercado tiene un alto potencial, pues aunque de acuerdo al INEGI, existen cinco millones de personas con discapacidad en el país, cifras de dependencias internacionales, destacan que la cifra es de diez millones. Por otro lado, Claudia Peralta rompe el paradigma de que “los discapacitados son personas con pocos recursos. En la agencia tenemos muchos clientes en esa condición, que viajan a Europa, toman cruceros y buscan paquetes para los destinos más costosos del país.”
Como publicamos en su momento en REPORTUR.mx Julio Castañeda, presidente de AMAV ha destacado que es necesario que autoridades e iniciativa privada comencemos a trabajar en una política de turismo inclusivo en el país -que en la actualidad no hay-, y se hace cada vez más necesaria, así como en ofrecer facilidades para la capacitación del personal.