Avianca enerva a las agencias al cambiar condiciones de su relación

Hace justo 16 años, en el mes de enero del año 2000, las líneas aéreas decidieron romper con la que hasta entonces era una equilibrada relación con su principal canal de ventas, las agencias de viajes, al reducir las comisiones que hasta en esa fecha les otorgaban por las ventas que generaban de boletos.

El argumento de ese entonces y hasta la fecha fue el alto costo que representaba para las líneas aéreas la intermediación por parte de las agencias de viajes; nada más alejado de la realidad, ya que si analizamos detalladamente este argumento, no es difícil darnos cuenta que con las políticas que han implementado las líneas aéreas en su afán de “eliminar este alto costo” han encontrado “soluciones” que terminan siendo más perjudiciales que benéficas (cada una de ellas más absurda aún que la anterior).

Tal vez, debido a la falta de experiencia en el ramo turístico de algunos dirigentes que han pasado por las líneas aéreas, a quienes su “gran formación académica” lo mismo les permite dirigir una línea aérea que cadenas de comida rápida, muy lejos han quedado los años dorados de la aviación en nuestro país en los que gente honesta, forjada en la cultura del esfuerzo diario, lograba posicionar a nuestras aerolíneas como ejemplo a nivel mundial, y para muestra basta recordar a Don Manuel Sosa de la Vega (Q.E.P.D.), verdadero personaje de la historia de la aviación nacional y mundial que iniciara su carrera profesional en un modesto cargo en la extinta Mexicana de Aviación. Él logró llegar a la dirección de la misma llevándola en dos periodos a sus mejores años, demostrando que para dirigir una gran empresa se necesita corazón y temple.

En los últimos años, las agencias de viajes han transitado por una etapa en la cual de manera adicional a la problemática diaria, propia del negocio, deben preocuparse por saber si las políticas de las líneas aéreas siguen siendo las mismas para poder ofertar de manera segura a sus pasajeros los boletos de avión a cambio de una raquitica comisión, por decir lo menos, o en algunos casos checar como va su monedero electrónico que se ha convertido en una especie de tienda de raya moderna, como en el caso de Interjet.

Así pues, las líneas aéreas siguen viendo a las agencias de viajes como un mal necesario y no como un aliado, que les representa más de 5 mil puntos de venta a nivel nacional con el menor costo y la mayor utilidad para ellas. Las agencias de viajes han pasado de la baja de comisiones a los cargos adicionales por combustible o seguridad (que evidentemente no se comisionan), en 2004 TACA les quitó las tarifas netas a los operadores, y el año pasado para ser exactos, como publicamos en REPORTUR.mx, Lufthansa comenzó a cobrar un cargo por la utilización de GDS para reservaciones, lo que tuvo el apoyo de aerolíneas como Iberia y British Airways.

Pero el último y más reciente cambio viene de Avianca, que ha tenido la ocurrencia de ir por segunda vez en contra de las agencias de viajes mayoristas (la anterior fue en 2004 cuando decidieron retirarles las tarifas netas a sus operadores), a quienes para otorgarles las tarifas netas les están proponiendo realizar un deposito por una determinada cantidad en dólares cada seis meses para renovar las mismas, se dice que una acción que se repite de manera constante se vuelve costumbre, la costumbre se vuelve obligación y la obligación se vuelve ley.

Sin embargo, los operadores esperan que este asunto no prospere o seria el inicio de una nueva etapa en donde a decir de los propios agentes de viajes estarían pagando por trabajar.