3 comentarios A pesar de la cercanía, buen humor, conocimiento de los terrenos que pisaba y de su incipiente gestión, el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, en la inauguración del Travel Mart Cancún Summit en su edición XXVIII, no cedió ni medio centímetro ante prácticamente la única petición del sector hotelero de Cancún encabezado por Carlos Gosselin: No hay marcha atrás en el tema de la calificación de los centros de hospedaje como lo señala el nuevo reglamento de la ley de Turismo, y como repetidamente han rechazado los hoteleros (Nueva clasificación de hoteles de la Ley de Turismo crea confusión: AHC).
Todo lo que ahí se pide es para tratar de ser mejores, dijo de la Madrid, «es el mensaje más poderoso que les podemos mandar a los touroperadores que nos visitan y que digan en México, a pesar de lo bien que les está yendo, es un sector que siempre está pensando en cómo mejorar el producto para sus clientes».
De muy buen humor De la Madrid, que como adelantó REPORTUR.mx se convirtió en el primer secretario de Turismo que inaugura un Travel Mart, dijo que «es la tercera vez que estoy aquí en Quintana Roo en tres semanas, a ver si no se me sienten en otros destinos». Me mostraron ya el proyecto de la terminal 4 del aeropuerto de Cancún que ya está en marcha, y que es del tamaño del aeropuerto de Monterrey. Eso no lo comenten mucho», bromeó, y aclaró todo esto se debe a la dinámica que tiene un estado abocado totalmente al Turismo.
En su recorrido por un piso de exhibición con pocos stands pero con mucha actividad, lucieron especialmente algunos ante la ausencia de Oasis –que se robaba el show en las anteriores ediciones– los hoteles de Playa Resorts Hyatt Ziva y Hyatt Zilara, AMResorts, Excellence y de los hoteleros quintanarroenses con muy buena presencia, Original Resorts, de la familia de la Peña, Grupo Palace, de José Chapur, que hizo acto de presencia con su hijo Gibrán, ademas de Karisma, que incluyen a los hoteles Azul y El Dorado de Lolita Lopez Lira y José Luis Gutierrez Alday.
En su recorrido, siempre escoltado por el equipo del gobernador Roberto Borge, quien permaneció siempre a su lado, al igual que José Chapur y el alcalde de Benito Juarez, Paul Carrillo, entre otros, contestó a una pregunta planteada por los reporteros sobre el presupuesto que se ha reducido y repitió lo que ya ha publicado REPORTUR.mx, (Primer golpe a De la Madrid: baja 16% presupuesto para Sectur) hizo referencia a las facilidades de crédito que tendrán los inversionistas a través de la banca de desarrollo, Bancomext, su anterior cargo, y cerró diciendo que «ahora voy a inaugurar un hotel (Secrets Akumal) que se construyó con recursos que yo otorgué a través de Bancomext».
La «única reclamación» de los hoteleros en relación al (por fín publicado) Reglamento de la Ley General de Turismo, es su rechazo a las disposiciones referentes a la clasificación hotelera. Argumentan, entre otras cosas, que su principal cliente, el turista norteamericano, no entenderá la clasificación propuesta.
Vale la pena recordar que en las épocas en que Pedro Joaquín fue titular de SECTUR, contrató confidencialmente a la AAA para que clasificara a los hoteles de México utilizando los parámetros con los que se clasifican los hoteles en Norte América. Los millones de turistas que viajan en automóvil en Estados Unidos y Canadá respetan al 100% las clasificaciones AAA.
Cuando la AAA publicó el Directorio de Hoteles de México, de inmediato le llovieron a Pedro Joaquín cientos de quejas de todos los hoteleros de México, alegando que la clasificación que daba la AAA a su establecimiento, era incongruente con la realidad. En el Directorio aparecían hoteles de 2 a 5 estrellas. No aparecían hoteles «Gran Turismo» o «Categoría Especial», por no existir en las clasificaciones de la AAA y lo peor: Sólamente aparecía en dicho Directorio un solo hotel de 5 estrellas, el Princess de Acapulco. Debemos hacer notar que las visitas de inspección que hace la AAA a los hoteles para su calificación, las hace en secreto. Es decir, mediante llamada de reservación de un aparente cliente individual que, a su llegada al hotel se registra como un simple huésped y durante su estadía, pagada al 100%, califica al hotel mediante la hoja de verificaciones que cubre muy detalladamente y sin prejuicios. (La llamada telefónica para reservar y la forma como el cliente es atendido también cuenta para la clasificación del hotel).
Para entonces ya había sido contratada con la AAA la Segunda Edición del Directorio de Hoteles de México, que se publicó aunque su distribución en México fue restringida.
Así pues, los hoteleros ya rechazaron un sistema de clasificación aceptado y reconocido internacionalmente: El de la AAA. Ahora rechazan el del nuevo Reglamento porque sus clientes no entenderán las posibles clasificaciones contempladas. Habrá que analizar muy a fondo el Capítulo del Reglamento que contempla estas calificaciones y el procedimiento para obtenerlas.
Bueno, por esta es una de las razones por las que los «Tour Operadores» europeos tienen sus propios sistemas de clasificación, que no son estrellas. Les invito a ver los catálogos de Neckerman, Cook, Vingresor, Hotelplan, Politur, etc. Uno usa palmeras, otro soles, etc. etc., y lo seguirán haciendo para todos los destinos que operan, no sólo para México. En todas partes se cuecen habas.
México necesita un sistema de clasificación, sea este de estrellas, diamantes, o palmeras. (con la debida explicación de su significado). Sería una señal de confianza para el público de todo el mundo. Si nuestro país no goza de una buena reputación por chapuceros, es probable que también lo extiendan a los honorables señores hoteleros, que a decir verdad con frecuencia se sirven con la «Cuchara grande» al auto clasificarse.
Agregado a mi comentario anterior: Los hoteleros no aceptaron los procedimientos de clasificación que propuso en su momento Pedro Joaquín, — igual que ahora no aceptan los procedimientos de clasificación que exige el Reglamento de la Ley que el Secretario de la Madrid ya les dijo que, lo quieran o no, «van». Ante la rebeldía de los hoteleros de entonces, igualito a la de ahora, Pedro Joaquín decidió contratar los servicios de la AAA. Este suceso o anécdota turística, si lo prefieren, me la contó el actual Secretario de Energía, Pedro Joaquín en persona, siendo en aquel entonces Secretario de Turismo.
FERNANDO BETANZOS.