Los controladores aéreos respondieron adecuadamente, ante las fallas del radar del AICM que debieron enfrentar la semana pasada, ya que realizaron las operaciones de forma manual, utilizando sus conocimientos, experiencia y técnica aseguró el secretario general del Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (Sinacta), Ángel Iturbe.
En declaraciones a El Economista, el dirigente señaló que todo lo realizado durante la contingencia estuvo bajo las normas aplicables al sector, hasta que se reestableció el sistema de control del radar, que de acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), falló cuando el Sistema Primario de Procesamiento de Radar y Plan de Vuelo del Centro de Control México presentó una degradación en su funcionamiento.
Como parte del plan de apoyo se estableció una coordinación entre los centros de control de Monterrey, Mérida y Mazatlán, que permitió desviar aviones.
Asimismo, “los controladores siguieron monitoreando los aviones sin necesariamente estarlos viendo en una pantalla de radar, sino calculando sus velocidades, rutas y conservando comunicación constante con las aerolíneas con lo que pudieron mantener las operaciones seguras. No hubo ninguna operación en riesgo”, sostuvo Ángel Iturbe.