El desplome turístico registrado en Acapulco no provocó que traslado de viajeros se dirigiera Cancún, como pudiera parecer, sino que el beneficiario de ese trasvase fue Veracruz, según informaron a REPORTUR.mx fuentes de primer nivel.
Ejecutivos turísticos del máximo nivel explicaron a este digital que los motivos para justificar que hayan sido los hoteles de Veracruz y no los de Cancún los gran beneficiados por la bajada de Acapulco tras la desaparición en Iguala de 43 normalistas son que por ejemplo para los turistas de Ciudad de México también lleva unas 4 horas de carro plantarse en el destino del Golfo de México.
Ir en carro a Cancún no es factible para la mayoría de capitalinos, además de que la hotelería en Quintana Roo ya se encuentra en máximos históricos, también de precios, luego del huracán Odile en los Cabos, y el cierre de África por el ébola, el cierre del Magreb por las revueltas árabes, y los problemas de Turquía con el Estado Islámico cerca de sus fronteras.
Los hoteles de Cancún y Riviera Maya tienen todo vendido prácticamente hasta febrero,, como ya informó REPORTUR.mx, y las agencias menos previsoras se han visto ahora sin camas suficientes que ofrecer a sus clientes, con lo que ahora la batalla está en la compra muy anticipada para la próxima primavera para evitar el riesgo de volver a quedarse sin producto a tres meses vista.
En Acapulco, entretanto, las caídas de ocupación no fueron tan acusadas como en principio se pudo temer, cubriendo el destino de Guerrero el pasado puente cerca de la mitad de sus cuartos, aunque eso sí, a precios bastante bajos, ya que el mexicano está menos influido que el tema de la inseguridad que el extranjero.
El Estado de Veracruz es el cuarto del país en cuanto a número de habitaciones, con unas 39,000, por encima de Guerrero, que suma unas 27,000, por debajo ambas de las 85,000 de Quintana Roo; las 63,000 de Jalisco, y las 49,000 de DF, como reveló REPORTUR.mx en su ranking de cadenas hoteleras en México.