1 comentario El presidente Donald Trump empeoró las cosas a principios de este mes cuando anunció restricciones que podrían bloquear el negocio de Estados Unidos en la isla. Southwest Airlines se unirá a otras aerolíneas estadounidenses en reducir los vuelos a Cuba, al señalar que las leyes que restringen los viajes por turismo de los estadounidenses a la isla limitan la demanda.
Southwest se convierte en la última aerolínea en aceptar que la industria, con pocos antecedentes para juzgar la demanda de antemano, fue demasiado optimista cuando los reguladores estadounidenses permitieron rutas de pasajeros a la isla el año pasado por primera vez en décadas. American Airlines y JetBlue redujeron previamente su servicio a Cuba, mientras que Spirit, Frontier y Silver Airways se retiraron.
Southwest dejará el servicio a Varadero y Santa Clara el 4 de setiembre y continuará volando a La Habana dos veces al día desde los aeropuertos de Fort Lauderdale-Hollywood y Tampa en Florida, informó la aerolínea en un comunicado el miércoles, reveló gestion (Spirit Airlines dejará de volar a Cuba a partir de junio).
“Nuestra decisión de descontinuar los otros vuelos a Cuba se produce después de un análisis en profundidad de nuestro desempeño durante varios meses que confirmó que no hay un camino claro hacia la sostenibilidad sirviendo estos mercados, particularmente con la continuación de la prohibición en la ley de Estados Unidos sobre el turismo a Cuba para ciudadanos estadounidenses”, dijo Steve Goldberg, vicepresidente sénior de operaciones terrestres, en el comunicado.
El máximo ejecutivo de Southwest, Gary Kelly, había dicho anteriormente que daría a los mercados de Cuba un año antes de decidir sobre la continuidad del servicio. La aerolínea con sede en Dallas comenzó los vuelos a Varadero en noviembre y a Santa Clara en diciembre (Poca ocupación en los primeros vuelos de Estados Unidos a Cuba).
Con Trump o con Barack los vuelos a aeropuertos que no son Habana tenian y tienen un nivel de ocupacion pesimo, lo de Trump es una excusa, la realidad es que la demanda no ha copado la oferta bajo este semi-modelo de turismo abierto que nunca lo fue.