Deja un comentario El vicepresidente y consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer, anunció en entrevista con el periódico español El Mundo que «para nosotros es fundamental seguir creciendo en La Habana, a nivel urbano, y continuar en aquellos polos donde ya tenemos implantación. Lo principal es ir de la mano con las autoridades cubanas y establecer planes a medio y largo plazo».
Meliá, que en Cuba es la cadena líder al gestionar más de 12.500 habitaciones en 28 establecimientos, atribuye su éxito en el destino, según su CEO, a «sin lugar a dudas una lealtad, una visión a medio y largo plazo, un saber entender a nuestros socios los cubanos y haber empezado de cero en la industria turística del país. Muchas de las empresas occidentales en Cuba fracasan porque quieren ver resultados a muy, muy corto plazo».
«Los primeros años fueron de mucho sacrificio y mucha inversión, donde no se conseguían rentabilidades, pero haber hecho las cosas bien junto a nuestros socios y haber apostado por el modelo de desarrollo del país ha conllevado que las cosas hayan salido de forma adecuada», explicó Gabriel Escarrer hijo, que asistirá esta semana a FitCuba junto a su padre y al responsable de la hotelera en el país, Gabriel Cánaves.
Escarrer detalló que «apostar por lugares como los Cayos fue una gran aventura. No hay infraestructura, no hay medios, hay roturas de abastecimiento, etc… Es complicado, pero es abrir un nuevo destino y con esa visión a medio y largo plazo, lo que en su día fue hípercostoso, hoy en día se confirma como un destino maravilloso. Para mí es la perla del Caribe, sin duda, y un país con un potencial tremendo».
Sobre la nueva etapa que se abre tras el deshielo entre Cuba y Estados Unidos, y la posible competencia de las empresas norteamericanas, el primer ejecutivo de Meliá opinó que «Sin lugar a dudas, pero hasta cierto punto es beneficioso. Lo que queremos es diversificar e internacionalizar aún más Cuba» (Meliá ingresó el pasado año en Cuba 435 millones de dólares).
«Durante 52 años ha estado vetado al público norteamericano y estoy convencido de que a medida que empiecen a entrar jugadores internacionales de gran prestigio ayudará a impulsar el nombre del país. Lo veo como algo estimulante, como un reto, y estoy convencido de que las autoridades cubanas sabrán, como lo han hecho en el pasado, priorizar a aquellos grupos que han sabido estar a las duras y a las maduras», apuntó Escarrer.
