Deja un comentario 
Un acontecimiento histórico para todo el país ha sido el anuncio del Presidente Juan Manuel Santos sobre la firma de la paz con las FARC el 23 de marzo de 2016, como fecha límite, y en mayo el abandono de las armas por parte de la organización terrorista. Sin duda, el turismo ha sido uno de los sectores económicos más comprometidos con este proceso de paz, pues su panorama sería muy alentador para el receptivo.
Se pronostica que si se firma la paz, el crecimiento del sector del turismo en el país podría llegar al 34%, así lo manifestó el presidente Juan Manuel Santos en la pasada Asamblea General de la OMT en Medellín; comparando la situación del país con la de Sri Lanka, cuando firmó la paz. Sin embargo, la proyección real del país en turismo, sin conflicto armado, es del 20%. El presidente Santos aseguró que tras firmar la paz, el turismo se disparará en Colombia.
Es de anotar que el sector en medio del conflicto ha venido en un constante crecimiento, en 2014 la meta, que se creía bastante ambiciosa, con 4 millones de turistas, llegó a los 4,2 millones de visitantes extranjeros. La proyección para 2018 es igualmente ambiciosa, pero como lo manifiesta la Ministra de Comercio, Industria y Turismo, Cecilia Álvarez-Correa, “las vamos a alcanzar. Si hemos logrado tanto en medio del conflicto, no hemos tenido un solo día de paz en los últimos 50 años, definitivamente Colombia está en el tiempo para la paz”.
Para el gobierno nacional el turismo es una de las apuestas más importantes, no solo como estrategia de progreso, sino también como uno de los sectores que más se beneficiará con la posible firma de la paz con la guerrilla. El turismo es el segundo sector que más genera divisas al país, después del petróleo. Según el presidente Santos, el turismo desplazó al carbón en cuanto a la generación de divisas.
Como lo registró este digital, Santos ha resaltado que el principal detonante del turismo será la firma de la paz, con lo que Colombia dejará de aparecer en la lista de países con un conflicto interno armado vigente. Aspecto que reconoció impide a un cierto número de turistas de visitar el país.
