Etihad lleva unos años comprando participaciones de grandes aerolíneas, y ahora solo en el continente americano no están en el capital de ninguna, motivo por el que Avianca se presenta como una opción sumamente atractiva para que entren en su accionario.
Avianca y Etihad ya hicieron público un acuerdo hace unos días para una ruta de carga, y REPORTUR.co pudo saber que el vicepresidente financiero o CFO de la aerolínea colombiana, Gerardo Grajales, se desplazó hace poco a Abu Dhabi.
Esta primera toma de contacto serviría para que ambas compañías se fueran conociendo, pero Etihad se caracteriza en los últimos tiempos por cristalizar estas alianzas iniciales con tomas de participación posteriores dentro de los límites que permite la ley de cada país.
Etihad Airways se hizo recientemente con el 29 por ciento de Air Berlin; el 40 por ciento de Air Seychelles; el 9 por ciento de Virgin Australia; el 2,9 por ciento de Aer Lingus; el 24 por ciento de la compañía hindú Jet Airways, y el 49 por ciento de Air Serbia, que renombrará como Jat Airways, así como el 33 por ciento de la compañía regional suiza Darwin Airlines, a la que designará como Etihad Regional, a lo que hay que unir su entrada en Alitalia, como reveló preferente.com, así como su estrechamiento de relaciones con South African Airways y Air France.
Europa, Asia, África y Oceanía son los continentes donde la compañía basada en Abu Dhabi y fundada en 2003 tiene presencia, y para entrar en América su tentativa más sería fue con la compra de Air Europa, que tras analizarla empezó con un acuerdo de vuelos de código compartido.
Avianca se encuentra ahora con una explotación óptima y una reconocida imagen internacional, con lo que sería un buen momento para vender una parte del capital a buen precio, ya que más adelante la compañía se expone a amenazas como los 300 millones de dólares que tiene retenidos en Venezuela, la mayor presencia de las low cost en Bogotá, la recesión en Brasil y la posible apertura de cielos en Colombia.
Además, la compañía de Germán Efromovich suma una importante deuda por el ambicioso encargo de nueva flota de aviones, con lo que una inyección de plata sería muy bienvenida.