El presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, le reveló a La República que el aeropuerto internacional en Bogotá aumentará en nueve sus puntos de abordaje, para poder acomodar más operaciones aéreas.
«Hemos identificado una oportunidad para aumentar a cinco puntos de abordaje directo en el muelle internacional y otros cuatro en el muelle nacional, con el objetivo de que, a medida que crezca el tráfico, podamos seguir acomodando más operaciones en la nuevo terminal», señaló.
Uno de los retos del aeropuerto del Dorado es el Puente Aéreo, que soporta en promedio, 32.000 pasajeros que entran y salen al día por la misma puerta, lo que genera congestiones e incomodidades. Además, se enfrentan a unas vías de acceso limitadas, a unas instalaciones que no son cómodas y a un servicio público de difícil acceso.
Para embarque y desembarque de pasajeros cuenta con 10 posiciones de contacto en Domo, más seis posiciones que construyó Opaín contiguas a esta terminal y dos más en la zona de mantenimiento.
Cerca de 40% de la operación del aeropuerto se hace en las posiciones remotas, lo que quiere decir que los aviones no tienen punto de contacto. De esta manera los pasajeros deben trasladarse en bus hacia los aviones, lo que implica mayor incomodidades.