Avianca anunció que se logró un incremento salarial para los pilotos y copilotos de ODEAA de un 11 por ciento, alcanzando así un acuerdo logrando poner a fin a la huelga que completó tres semanas y que tenía afectado el servicio, aunque la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles (ACDAC) se retiró de la mesa de negociación.
«En este contexto, la compañía destaca con gran satisfacción el acuerdo logrado con esta organización que aglutina al 57 % de los aviadores de la aerolínea», señaló Avianca, tras 21 días de negociaciones.
La compañía propiedad de Germán Efromovich agrega que el acuerdo alcanzado «cumple con el objetivo trazado en el sentido de lograr un incremento material de alrededor del 11% en los ingresos de los pilotos y copilotos, y está ligado a aumentos en productividad y eficiencia».
Según Avianca, este acuerdo, que regirá las relaciones laborales con los pilotos por un período de cuatro años, tomando como punto de partida el 1 de abril de 2013 hasta el 31 de marzo de 2017, será plasmado en un «plan voluntario de beneficios», que será puesto a disposición de los pilotos.
El conflicto actual entre Avianca y los pilotos surgió con el vencimiento del pacto colectivo que tenían desde 2009, y que se empezó a renegociar a mediados de este año después de que la empresa lo demandó. Al no lograr un acuerdo con la compañía, los aviadores decidieron iniciar el pasado 13 de septiembre la que denominaron ‘Operación cero trabajo suplementario’, que consiste en dejar de realizar las actividades que no están en el reglamento y que habían asumido para hacer más efectiva la operatividad de la aerolínea.
Tras el inicio de la operación y con el clima jugando en contra (pues en esos primeros días se cerró la pista al comienzo del día por baja visibilidad), Avianca sufrió grandes retrasos en sus vuelos y la cancelación de otros. Tras la primera semana y con la implementación de un plan de contingencia, se habían cancelado cerca de 200 vuelos y se modificaron los itinerarios de alrededor de 12.000 viajeros de la aerolínea. Después de esto, la compañía optó por extender su estrategia hasta el 31 de octubre, y diseñó planes especiales para la temporada de receso escolar.
Así, el lunes 16 de septiembre se instaló la mesa de negociaciones entre las dos partes después de la intervención del vicepresidente Angelino Garzón. En este espacio además de los implicados se tuvo el acompañamiento de un delegado de la vicepresidencia y el ministro de Trabajo, Rafael Pardo.
La protesta de trabajadores ocasionó la cancelación de más de doscientos vuelos y afectó a miles de viajeros del país y a extranjeros. La huelga en cumplir únicamente con las tareas estipuladas en los manuales de vuelo y dejar de realizar trabajos considerados extras.
Todo comenzó cuando Avianca denunció la convención colectiva en marzo de 2013. La aerolínea, por aquel entonces, emitía un comunicado en el que confirmaba que “la empresa, actuando dentro de su marco legal, procedió a denunciar dicha convención y a presentarles en los meses siguiente propuestas económicas, invitando a los aviadores a analizar la propuesta de renovación de sus beneficios económicos”, los cuales no convencieron a sus trabajadores.
A partir de entonces, los dos gremios de pilotos, ODEAA y ACDAC, decidieron iniciar la operación llamada ‘cero trabajo suplementario’, en la que se negaban a realizar tareas que no fueran estrictamente las que estaban estipuladas dentro de su convenio.
Además, con esta operación, reivindicaban una subida salarial (que en un principio se sitúo en el IPC+25%) porque alegaban tener una pérdida del poder adquisitivo del 14,9% y un salario 40% inferior al de sus compañeros de la región.