La empresa de bandera argentina, Aerolíneas Argentinas viene sufriendo una gran turbulencia desde que asumió el gobierno nacional en diciembre de 2023. Con gran incertidumbre de no saber su futuro, aquel que determine si se privatiza o sigue siendo estatal, o si se cierra o si alguien toma una solución y continua funcionando.
Empecemos con diciembre del año del 2023, Aerolíneas Argentinas concluyó el ultimo mes con equilibrio financiero. Es su cierre anual en 2023 con ganancias estimadas en 32 millones de dólares. Este hito no solo marca un momento histórico al alcanzar un equilibrio financiero por primera vez desde 2008, sino que también resalta la eficiencia y rentabilidad potencial de las empresas públicas.
En febrero de este año los sindicatos rechazan el aumento de 12% que le ofreció el Gobierno a los trabajadores de Aerolíneas Argentinas. Porque aseguran que padecen “un desfasaje salarial insostenible del 70% respecto a la inflación registrada” por el propio gobierno. Esto lleva a un paro aeronáutico para el 28 de febrero.
Para Semana Santa, a finales de marzo e inicio de abril, a último momento se levantó otro paro aéreo de 48 horas por acordar un compromiso de acuerdo en las mejoras salariales, pero Aerolíneas Argentinas asegura que hizo caer 98% las reservas de vuelos para ese finde extra largo. Sin embargo, los sindicatos aeronáuticos APA, APLA y UPSA seguían en estado de alerta y movilización para abril.
Por el paro de transportes en mayo Aerolíneas Argentinas informó que reprogramó unos 20 vuelos previstos para el lunes 6 de mayo entre las 8 y las 11 horas, en el marco de las asambleas sin prestación de servicio convocadas por la CATT (Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte).
En junio, el conflicto por los recortes en la compañía afectó directamente la calidad del servicio y la imagen de Aerolíneas Argentinas en rutas internacionales. La empresa comenzó a operar vuelos a Miami con escalas en aviones de menor capacidad y reprogramó otros destinos. Cancelaron vuelos a Cancún, Madrid y Roma.
En el mes de julio, y en vista a las vacaciones de invierno, las asambleas para mejorar las condiciones salariales y laborales provocó que en la jornada del 12 de julio se llevaran adelante asambleas a partir de las 6 de la mañana en el aeroparque Jorge Newbery. Asimismo, se repitió la misma modalidad de protesta en el aeropuerto internacional de Ezeiza esa misma jornada pero a las 21:30 horas.
En agosto continuaron las asambleas con modificaciones de horarios en los vuelos como forma de medidas para visibilizar los reclamos que desde mayo no incrementan el sueldo. Según APLA, los sueldos se encuentran debajo del 60%.
En septiembre, el conflicto en Aerolíneas Argentinas se sigue profundizando. Al mediodía del viernes 13, un paro calificado de «salvaje» por el gobierno nacional de 24 horas afectó a más de 37 mil pasajeros, con 319 vuelos cancelados. La ministra de seguridad la definió como “intempestiva, abusiva y fuera de contexto, promocionada por dirigentes gremiales de forma irresponsable”.
Comienza entonces con mayor énfasis la idea de privatizar Aerolíneas Argentinas por parte del presidente Javier Milei. Tras haber quedado fuera de la lista de empresas a privatizar en la Ley de Bases, el oficialismo reflota así la idea de vender Aerolíneas Argentinas, en el marco del conflicto con los gremios aeronáuticos y los paros que se sucedieron en las últimas semanas.
En octubre, y en pleno conflicto entre el gobierno y los trabajadores de Aerolíneas Argentinas, los gremios buscan que interceda el Gobierno de Lula da Silva, presidente de Brasil para mediar y dar solución al conflicto. El sindicato de aeronautas brasileño mantuvo conversaciones con APLA y AAA y luego se reunió con el ministro de Trabajo de su país para alertar sobre la posibilidad de que empresas extranjeras asuman operaciones de Aerolíneas Argentinas.
En noviembre, hay un proyecto de ley para privatizar Aerolíneas Argentinas, impulsado por parte de la oposición y que cuenta con el apoyo del oficialismo, fue avalado por la mayoría de los miembros de las comisiones de Transporte y de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Baja. El mismo estipula que se privatice el 49% de la empresa, quedando el 51% en manos del Estado; tal como lo informó REPORTUR.com.ar (Ultimátum de Milei: Aerolíneas Argentinas “se privatiza o cierra”)