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Marina Colunga, directoria de ventas de Iberia para Latinoamérica, dialogó con REPORTUR.com.ar acerca de la relevancia que tiene la ruta Madrid – Buenos Aires para la compañía y que la operan desde hace más de siete décadas.
RERPORTUR.com.ar:¿Qué significa la operación con Argentina para Iberia?
Marina Colunga: Argentina tiene un lugar muy primordial, muy relevante, dentro de Latinoamérica, no sólo porque fue el primer país en el que volamos, en el que vamos a cumplir 77 años, sino también porque está en el top 3 de los países en los que tenemos operaciones en términos de contribución, entonces definitivamente nuestra operación está recuperada a los niveles anteriores de la pandemia.
R: ¿Cuál es la estrategia para mantener ese posicionamiento?
Parte de nuestra apuesta para la aceleración y el crecimiento entre Argentina y Europa, es el uso de los aviones nuevos con mayor capacidad, para esta ruta. Los A350 empezaron a aperar en enero de este año, como parte de nuestra flota, es un avión de los más nuevos y premium en los que logramos incrementar el número de asientos de 288 a 348. Es una forma de seguir incentivando una ruta que funciona muy bien y que históricamente ha sido importante para la gestión de Iberia para Latinoamérica.
R: La frecuencia en la ruta que había en 2019, ¿se ha recuperado por completo?
M.C.: Si, estamos volando con 2 vuelos diarios, los 14 semanales. Y adicionalmente a la frecuencia que nosotros tenemos, tenemos algunos vuelos de conexión interna para conectar con otras ciudades dentro de Argentina. La recuperación de las frecuencias está y con el cambio de avión tenemos más asientos.
R: ¿Cómo está el porcentaje de ocupación de esos vuelos?
M.C.: Los factores de ocupación de Argentina son buenos. No están al 100%, pero casi a su capacidad completa y esa es la razón fundamental por la cual nosotros seguimos apostando. Hay apetito por los argentinos por viajar y hay apetito de los europeos por Argentina; históricamente es una ruta que une a España y Argentina, ambos países están muy relacionados y son rutas que funcionan.
R:¿Qué cambios han notado en los tipos de pasajeros?
M.C.: Históricamente es una ruta fuerte para turismo corporativo, sigue siendo una ruta fuerte para este negocio, pero cuando nosotros analizamos los perfiles de los viajeros que está volando de Buenos Aires a Madrid y a la inversa; se ha visto cambio en el estilo de viaje. Sucede que el crecimiento de los viajeros individuales o de placer, ha contrarrestado en el balance final, al segmento corporativo, que todavía está por detrás de los niveles. En el 2023 estamos trabajando para recuperar los mismos niveles del segmento corporativo. Lo cierto es que en términos de participación de mercado seguimos creciendo, es una cuestión más vale del segmento en general.
R:En cuanto al período de anterioridad con el que se realiza las compras de los tickets, ¿Qué cambios han notado?
M.C.: Todavía es muy temprano para poder decir que hay un cambio sostenible. Lo cierto es que con todo lo que sucedió en los últimos años, hemos visto que había una ventana de compra más corta, porque la gente no se quería comprometer a viajar ante la incertidumbre de las restricciones al lugar que llegaba. Eso quedó en el pasado. Nuestros períodos de anticipación de compra se están extendiendo y están regresando a la normalidad -entre 60 y 90 días- y en lo que va del primer trimestre de este año, ya se ve que esa anticipación regresa para lo que es el verano en Europa y el invierno en Argentina.
R: ¿Iberia tiene proyectado abrir otras rutas que conecten con Argentina?
M.C.: En este momento no. Nosotros queremos consolidar y seguir creciendo en la ruta que existe. Además, tenemos acuerdos con diferentes partners que nos permite conectar con los destinos domésticos más importantes. Estamos enfocados en la rentabilidad, en la funcionalidad de las rutas que tenemos y en la reactivación del sector corporativo que es muy importante; más que en extender la cobertura de Iberia.
R:¿Qué dificultades han sorteado al operar en Argentina por la economía del país?
M.C.: En términos de operación, toda la dinámica de la economía de Argentina no nos ha impactado de la misma manera que a una aerolínea doméstica. Nos hemos ido acomodando y alineando con la normativa y contribuimos de manera positiva a la economía argentina. Cuando nosotros volamos una ruta, hay un impacto positivo en un efecto cadena de todo lo que implica. El impacto de las rutas que operamos en Argentina han tenido para el país números bien interesantes: la ruta entre Buenos Aires – Madrid, entre directos, indirectos y concatenados genera 12.500 empleos. A mí me gusta pensar finalmente, que ese es el impacto, y ese es el reto que nosotros tenemos, la contribución y el impacto positivo.
