El viernes comenzó a regir el aislamiento obligatorio y preventivo que dispuso el gobierno nacional hasta el 31 de marzo para evitar la circulación y propagación del virus del Covid-19 en Argentina. Frente a estas disposiciones las agencias decidieron trabajar de manera remota dando prioridad a las personas que tienen previsto su viaje a corto plazo tanto para reprogramación como para la cancelación.
En este sentido, ante las remisiones de los vuelos, denuncian que el sistema automáticamente calcula sí o sí el 30% en base a la emisión pasada, sin dar lugar al pasajero a que la diferencia del abono de la tarifa sea en dólares, incluso en aquellos que sí lo habían realizado cash en un inicio.
Por su parte, las mayoristas, algunas de ellas como es el caso de Ola, decidieron llevar al plano digital los seminarios y las capacitaciones destinadas a las agencias. De esta manera, le hacen frente al parate de los eventos presenciales, y evitan que se detenga parte de su actividad económica.
Las agencias de viajes emisivas están en una situación crítica que empeoró con la pandemia del coronavirus y que se sumó a medidas como el cepo para la compra del dólar, el dólar turista y el impuesto PAIS, como informó REPORTUR.ar. (Alarma en las agencias: despidos porque “no se vende nada”)