La semana pasada se llevó a cabo en Buenos Aires la tercera reunión de ReformBnB, organizado por Federación Empresaria Hotelera Gastronómica (Fehgra), la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT) y la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (Ahrcc). Es el tercer encuentro – los anteriores fueron en Nueva York y Barcelona- que contó con representantes del sector hotelero de 15 países que se unieron en un “frente común” contra la oferta informal de los alojamientos turísticos temporarios.
En Argentina son alarmantes los números: son 502.801 plazas en 110.273 ofertas de alquiler temporario, mientras que hay unas 432.562 plazas en 5.825 alojamientos hoteleros registrados, según los datos recabados por Fehgra.
En 2018, en la ciudad de Buenos Aires se registraron más de 350.000 llegadas de viajeros a través de Airbnb. Según estima la empresa, estos turistas generaron un impacto económico directo estimado de USD 393 millones, hospedaje más gastos de los huéspedes. El 73% de esas propiedades publicadas corresponden a departamentos completos y el resto son habitaciones privadas o compartidas.
El principal reclamo expuesto en la ReformBnB es en torno al cambio en la legislación para que tengan responsabilidades y obligaciones al igual que los hoteleros. Un representante del sector exigió: “Queremos que se incorpore el concepto de la ‘temporalidad’ como factor distintivo para esclarecer la responsabilidad en el alojamiento”.
Además, requieren la existencia de un “registro obligatorio” de todos los anfitriones que permitan a las autoridades monitorear y controlar la actividad de los alojamientos turísticos y vetar a los que no cumplan con los requisitos. Y la aplicación de una carga fiscal similar para hoteles y alojamientos turísticos: “Un número equitativo de tasas al que ya se aplica en hoteles, debe ser pagado por la industria de los alojamientos turísticos. El cumplimiento con la regulación fiscal sería un factor clave para una competencia justa”, concluyeron.
Como informa REPORTUR.com.ar; desde el ingreso de las plataformas de alquileres informales, el sector hotelero pide que estos alojamientos paguen tributos y resaltan que son inseguros para los turistas porque todas las regulaciones que el gobierno obliga a los hoteleros a cumplir las desatiende a la hora de los departamentos para alquilar. (Hoteleros recuerdan que Airbnb es inseguro y no paga impuestos)