La agencia Rumbo 361, que había sido acusada hacía unas semanas, por un grupo estudiantil, ahora fue denunciada por otros particulares.
El responsable de la agencia de viajes de Río Grande salió a defenderse ante las acusaciones del grupo de padres de estudiantes luego que trascendiera que la agencia estaba inhabilitada para vender pasajes.
Según el titular, la casa matriz de la agencia estaba en Buenos Aires y al mudarse a Río Grande está demorada la habilitación. Desde el MINTUR sin embargo indicaron que desde noviembre de 2016 la agencia había perdido la habilitación correspondiente.
Ahora la agencia suma una nueva denuncia de particulares que han comprado aéreos y que la agencia no habría pagado a las compañías. Además un matrimonio radicó otra denuncia por un fraudulento uso de tarjeta crédito sin autorización que habría sido una maniobra de la agencia en cuestión por gastos de una alta suma de dinero.