El legendario hotel Mayaland en Chichén Itzá, que por estos días cumple 100 años de haber sido inaugurado por Don Fernando Barbachano Peón, se suma a la orgullosa lista de hoteles del mundo que por unas razones u otras, no solo son emblemáticos, antiguos, carismáticos y hermosos, sino históricos; porque son testigos mudos de acontecimientos de época, de epopeya, que cambiaron al mundo. Por todo el mundo, sobre todo en las viejas capitales, pero también en las campiñas, en lagos y montañas, existen esos hoteles que alojaron a los reyes, a las personalidades, a los refugiados, a los jefes de estado y hasta a los delincuentes famosos; a los dictadores, a los generales y a las estrellas del cine.
El Hotel Mayaland en Chichén Itzá, fundado en 1923, se encuentra en esa categoría de hoteles históricos y es un icono, por ser el primero en el mundo en haberse construido dentro de un sitio arqueológico, lo cual hoy podría ser altamente criticado, pero cabe recordar que cuando Don Fernando Barbachano Peón, compró los terrenos a Edward H. Thompson, primer propietario, Chichén Itzá no lucía como hoy; el sitio era un montón de piedras, que Thompson adquirió por 75.00 dólares.
Barbachano si que tuvo visión, pero es seguro que nunca imaginó en lo que se convertiría Chichen Itzá y la industria turística, aunque fue pionero de ella.
Hay algunos grandes del turismo como Don José Meliá, fundador del emporio Meliá, hoy propiedad de la familia Escarrer, como Don Alberto Bojórquez, en México, como el querido Doctor Don Ángel Miolán, el padre del turismo en la República Dominicana (- y los turistas, ¿Dónde están? – , en la cabeza de Miolán, decía la gente), y sin duda como Don Fernando Barbachano Peón.
Es absurdo pues, pensar que una propiedad histórica, memorable e icónica como el Hotel Mayaland, pueda estar en litigio y que se ponga en duda la autenticidad, la capacidad probatoria y la legitimidad de sus auténticos propietarios, la familia Barbachano.
En un intento abusivo, casi gangsteril y en el total uso de las nuevas prácticas de invasión y despojo de propiedades, un grupo de abusivos, por decir lo menos, apoyados por otro grupo de corruptos funcionarios, probablemente del mas alto nivel, han querido apoderarse del histórico Hotel Mayaland y despojar a la familia de un recinto, que no solo les pertenece por generaciones, sino que sería inadmisible pasara a otras manos, que sin duda por su falta de arraigo, cariño y compromiso con la historia, terminarían acabando con él.
Por fortuna, parece, que se hará justicia y que muy próximamente el legendario Mayaland en Chichén Itzá pasará de nuevo a estar en manos de los herederos de Don Fernando, luego de haber sido avasallado, ultrajado y de haber sido tomado por la fuerza, tristemente con algún apoyo de algún alto, muy alto mandante del gobierno.
La historia moderna del sitio arqueológico de Chichén Itzá, y la cantidad de visitas emblemáticas que ha recibido de todo el mundo, no se puede concebir, sin la presencia del Hotel Mayaland, lo que sin duda enriquece también a la historia antigua y respetable del sitio.
El legado de Don Fernando, uno de los precursores del turismo en México, uno de los más grandes visionarios que hemos tenido en esta industria, hoy se mantiene vivo; su nieto Fernando Barbachano Herrero, lo sigue y lo cumple a cabalidad con liderazgo, honestidad y compromiso. Mi compromiso y solidaridad también con él y con todos esos que nos han legado, lo que hoy es la industria turística. Que no se dude de ellos, y que se les reconozca como es debido.
«En un intento abusivo, casi gangsteril y en el total uso de las nuevas prácticas de invasión y despojo de propiedades, un grupo de abusivos, por decir lo menos, apoyados por otro grupo de corruptos funcionarios, probablemente del mas alto nivel, han querido apoderarse del histórico Hotel Mayaland y despojar a la familia de un recinto, que no solo les pertenece por generaciones, sino que sería inadmisible pasara a otras manos, que sin duda por su falta de arraigo, cariño y compromiso con la historia, terminarían acabando con él.»
EFECTIVAMENTE es el típico abuso gansteril que caracteriza a la 4T desde su cabeza hasta la mugre en las uñas de los pies.
Con mentiras, calumnias, difamaciones, sin pruebas de nada, mucha palabrería, mucha corrupción y falta de toda ética moral como presume diario la banda del palacio.
Ya quisieran tener este icónico hotel para instalar la chocolatera o cualquier otro de los negocios turbios que ostentan estos miserables en el poder.
Felicidades Sr Fernando Barbachano hijo y familia por aguantar la peste de 4a
Porque ustedes no se merecen una canallada asi de toda la bola de resentidos que estan en el poder hoy en dia, mientras su abuelo recibia a personalidades internacionales, el tartufo ni habia nacido, pero despues cuando nacio solo dio problemas en macuspana, en la unam, en el DF se planto en Reforma, y ensucio la plaza de la constitucion y odia las leyes y todo lo de ella emanan, es una desgracia para el pais, siempre se dijo desde auto-proclamarse prejjidente hasta hacer las atrocidades que no se imaginaron desde antes del 2018.