El crucero de lujo Carnival Sunshine quedó atrapado en un temporal que causó pánico entre pasajeros y tripulantes, donde se escucharon rezos y gritos. El barco hacia el recorrido entre Bahamas y Carolina del Sur, pero fueron sorprendidos por una tormenta con vientos que superaban los 130 kilómetros por hora.
“Todo lo que pasó fue aterrador. Nos quedamos en nuestro camarote y rezamos por estar bien. Discutimos el hecho de que sería muy improbable sobrevivir en el agua incluso con chalecos salvavidas y dudábamos de que los botes salvavidas pudieran ser lanzados en esas condiciones”, contó el pasajero William Blackburn a CNN.
Describió lo sucedido como si el barco chocara contra una pared, “todas nuestras cosas salieron volando de los mostradores, el equipaje se cayó y deslizó”, dijo Blackburn. Sin embargo, no hubo pasajeros heridos y la embarcación sufrió daños menores.
“El viento aullaba, todo lo que podía ver fuera era un sólido muro de agua y lluvia mezclada. La puerta del balcón del camarote de al lado se había roto y daba unos portazos espantosos. El techo y las paredes crujían, y el barco hacía ruidos horribles, y a veces vibraba violentamente como si los motores lucharan contra las olas embravecidas” narró el pasajero al mismo medio.
El Carnival Sunshine que tiene capacidad para 3.002 pasajeros y 1.040 tripulantes, con 14 niveles ya está nuevamente operativo.