Los pilotos de Latam Group están en pleito con la compañía, pues reclaman las condiciones de un único empleador, pese a que existen contratos con dos empresas, Latam Airlines Group y Transporte Aéreo S.A., conocida como Latam Express.
En el momento existen dos juicios laborales donde los pilotos esperan que la justicia nombre a un único, donde los demandantes son el Sindicato de Empresa de Pilotos de Transporte Aéreo S.A. (Siplach) y el otro el Sindicato de Empresa de Pilotos de Latam Airlines Group S.A.
Siplach recibió en octubre una sentencia a favor del Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, donde definía que ambas entidades eran “una misma unidad económica para efectos laborales y previsionales, permitiendo la posibilidad de que los sindicatos constituidos en las empresas, de acuerdo a sus estatutos, puedan afiliar a cualquiera de los trabajadores contratados por las compañías”, así lo recoge DFSUD.
En la demanda de los empleados establecía que luego de la pandemia, “muchos de estos trabajadores despedidos posteriormente volvieron a prestar servicios para Latam Group S.A., impidiendo que puedan volver a afiliarse a Siplach”.
En la primera instancia señalan que existe una “interoperabilidad de los recursos humanos, ya que ambas empresas, mediante el poder central, establecen un escalafón que determina la promoción y el crecimiento dentro de lo que se denominó como compañía, que no es más que la concepción unitaria de ambas empresas”, dice la sentencia del Segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago.
Y agrega que “los uniformes y credenciales de los trabajadores son idénticos para ambas empresas, reforzando la percepción externa de que Latam Airlines y Transporte Aéreo S.A. son una sola entidad”, detallan.
Así mismo, indica la sentencia, los altos cargos gerenciales supervisan la operación de ambas compañías, lo que demuestra que existe una sola administración centralizada.
Como lo informó REPORTUR.co, en octubre el Grupo Latam regresó a la Bolsa de Nueva York en Wall Street con el simbólico “Ring the Bell” o “toque de campana”, luego de haberse retirado en 2020 por su bancarrota ante los impactos de la pandemia y el proceso de reestructuración. (Latam presume de menos personal y más aviones que antes de quebrar).
En la presentación a los inversionistas, Latam destacó en su momento que ha implementado US$1.300 millones en iniciativas de ahorro anual, incluyendo la renegociación de contratos de flota y la armonización de los tipos de aviones. Además, destacó la bajada de los costos operativos, gracias a menos empleados en comparación al 2019, su último año antes de quebrar, pese operar hoy con mayor capacidad. Con ello logró una reducción de costos operacionales de US$162 millones el año pasado.