La inteligencia artificial ocupa cada vez más un espacio central en la industria aerocomercial, ya que permite asignar asientos, mantener la flota y gestionar el desperdicio de alimentos, entre otras funciones, con un foco en la personalización del cliente.
En este sentido, Isabel Rodríguez, directora comercial de Iberia Express, considera en diálogo con Expansión que “los datos nos permiten conocer mejor a nuestros clientes y responder a cualquier necesidad en tiempo real. Nosotros usamos la inteligencia artificial para recomendar rutas afines o para resolver dudas a través del chatbot, basado en un modelo de clasificación que procesa el lenguaje natural».
Iberia, además, organiza el peso de sus aeronaves con la ayuda de la IA. En el caso de la asignación de asientos, esta tecnología entra en escena en cuestión de un segundo, cuando el cliente hace el ‘check in’ online.
KLM, por ejemplo, utiliza esta tecnología para identificar el mal tiempo y anticipar qué horario sería mejor para operar el mayor número de vuelos. Qatar, por su parte, ha creado a Sama, una azafata que forma parte de la primera tripulación de cabina virtual con inteligencia artificial. Sorprende, porque confundirla con una persona de carne y hueso es muy sencillo.
«Se trata de un hito fundamental en la sinergia entre tecnología y conexión humana, no sólo para Qatar Airways, sino también para la industria en general», asegura el vicepresidente de Marketing de la aerolínea, Babar Rahman, al mismo medio.
Otras aerolíneas recurren a la IA para gestionar la comida abordo con el objetivo de ajustar las cantidades y no malgastar alimento.
Sin embargo, siempre hay un paso más adelante. La inteligencia artificial predictiva poco a poco da paso a la generativa que aumenta la productividad. “Añadir esta tecnología en la mayoría de nuestros procesos nos hará tomar mejores y más rápidas decisiones», considera Ferrán García Rigau, director de Data & CRM de Iberia.
A ver si la aplica a la accion y el dividendo…