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Latam se opone a la fusión de Iberia y Air Europa porque considera que se concentraría el tráfico aéreo en las dos aerolíneas españolas con el 54% de las frecuencias desde el aeropuerto de Barajas y eso afectaría a la ruta que opera de Sao Pablo a Madrid.
Para impedir esta fusión, la aerolínea latina solicitó en enero participar como tercer interesado ante el organismo antimonopolios de Brasil. Considera que estas nuevas condiciones serían una fuerte restricción para sus pasajeros, según lo recoge Infobae.
En este contexto, Latam pidió al Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) que condicione la autorización de la fusión al «mantenimiento de los contratos» de Iberia y Air Europa con sus competidoras en condiciones económicas «equivalentes a las más favorables» practicadas por las aerolíneas españolas.
Iberia y Air Europa, por su parte, pidieron al organismo que tratase la fusión mediante procedimiento sumario, al considerar que la operación no suscitaba «ninguna preocupación competencial» por el solapamiento «limitado» de sus actividades.
Como lo informó REPORTUR.com, las cinco claves que permitirán la absorción de Air Europa por parte de Iberia dentro del nuevo plan presentado por IAG a la Comisión Europea suponen un mayor número de rutas cedidas, y la inclusión de nuevos competidores, además de como tercer factor el alargamiento de los plazos para el cierre hasta 2024. A ello se unirá el retorno de la danesa Margrethe Vestager a la Comisaría de Competencia en Bruselas, y la contratación en paralelo de asesores jurídicos de primer nivel. (Iberia-Air Europa: las 5 claves para que les permitan la absorción).
