Frontier considera replicar elementos del modelo europeo de aerolíneas de bajo costo, como Easyjet y Ryanair, para mejorar la confiabilidad operativa y alcanzar niveles de beneficios anteriores a la pandemia, publica Simpleflying.
Sin embargo, las diferencias estructurales y los altos impuestos sobre el combustible de aviación en Estados Unidos pueden limitar la capacidad de Frontier para adoptar plenamente las estrategias de ahorro de costos de sus colegas europeas.
Frontier, básicamente, ofrece un beneficio específico: precios bajos. Al igual que las americanas Spirit Airlines o Allegiant Air, busca eliminar prácticamente todos los lujos de la experiencia del pasajero en favor de valores módicos.
En Estados Unidos, las tarifas de estas aerolíneas pueden parecer bajísimas, pero por lo general solo ofrecen un descuento del 20% o 30% en comparación con sus equivalentes de servicio completo.
Al otro lado del Atlántico, Easyjet y Ryanair superan los límites de lo que es posible en términos de tarifas más bajas, descontando tarifas tan bajas como un tercio o un cuarto de los equivalentes de servicio completo.
Para Frontier, la clave es la siguiente: ha descubierto que las aerolíneas europeas logran un gran nivel de éxito al devolver los aviones a la base cada noche y requieren que se equilibren muchas menos piezas móviles para garantizar operaciones sin problemas.
Como reveló REPORTUR.us, en su modelo de reducir costos, Frontier eliminó en agosto pasado la atención telefónica y alienta a sus pasajeros a realizar el check-in en línea (Frontier complica el check-in físico tras eliminar la atención telefónica).