La compañía Boeing estaría en crisis por cuenta de la escasez de ingenieros calificados para la fabricación de las aeronaves, por lo que no podría cumplir con los pedidos, pues luego de la pandemia la demanda de la industria aeronáutica se disparó.
Esta situación repercutiría en una desaceleración de la producción y la innovación. La presión sobre Boeing se reflejará indirectamente en toda la industria de la aviación a medida que más aeronaves y piezas de aeronaves se encuentren en pedidos pendientes.
Aunque algunos ingenieros han manifestado no jubilarse anticipadamente, el aumento de los intereses puede obligarlos a hacerlo, pues se anticipa que estas tasas leguen al 5% para noviembre de este año, lo que reduciría el pago de la suma global en un 25%. Varios pensionados alcanzarían alrededor de un millón de dólares y los ingenieros que decidan mantenerse otro año, podrían perder entre US$200.000 y US$300.000 en pagos de pensión por aumento de intereses.
Serían de 600 a 700 ingenieros y personal técnico de Boeing los que estarían evaluando si se retirarán antes de tiempo, pues el sindicato de trabajadores, Sociedad de Empleados Profesionales de Ingeniería Aeroespacial (SPEEA), les ofrece dos opciones de pagos para pensionarse, uno una suma global de los fondos adeudados al momento de la jubilación y el otro un pago mensual durante varios años, de acuerdo con Simple Flying.
Boeing durante la pandemia eliminó cerca de 2.900 empleados técnicos y de ingeniería, pero con la alta demanda que vive actualmente la compañía, ha pagado enormes sumas de dinero en bonos de retención para retener a su personal experimentado.
Como lo informó REPORTUR.us, Delta compra 100 aviones Boeing del modelo más grande de la familia MAX, el 737-10, de última generación, el cual mejora la eficiencia del combustible y brinda economía operativa, además tiene la opción de adquirir otros 30. La entrega de las aeronaves iniciará en 2025. (Delta ofrece asientos más cómodos al comprar cien Boeing 737-10).
“El Boeing 737-10 será una adición importante a la flota de Delta a medida que damos forma a un futuro más sostenible para los viajes aéreos, con una experiencia del cliente superior, eficiencia de combustible mejorada y el mejor rendimiento de su clase”, dijo en su momento Ed Bastian, CEO de Delta. “Estas nuevas aeronaves brindan una economía operativa superior y flexibilidad de red, y el acuerdo refleja nuestro enfoque prudente para desplegar nuestro capital”.