Si usted ve por Europa una caravana de camiones con material de oficina, existe una alta posibilidad de que sea el Parlamento Europeo que periódicamente viaja entre Estrasburgo y Bruselas, o el Consejo, que lo hace entre la capital belga y Luxemburgo; pero si usted ve una caravana similar en Estados Unidos, lo más probable es que sea Boeing, quien nuevamente ha decidido mudarse, abandonando Chicago por Arlington, en Virginia.
El fabricante de aviones, cuyas factorÃas están fundamentalmente en Seattle, donde siempre tuvo su sede, ahora cambia y vuelve a cambiar de sede, a ver si nuevos destinos le traen más suerte.
Arlington está en Virginia, pero en realidad está en Washington porque está al otro lado del Potomac, a un tiro de piedra del Congreso y de la Casa Blanca.
El fabricante ha tenido que dar un motivo para este traslado que lógicamente no resuelve ninguno de sus problemas con los diversos modelos de aviones: ahorrar en costes de oficinas. En Chicago, Boeing ocupaba un edificio de 36 pisos. La antigua sede, la original, en Seattle, ya la vendió en el pasado.
Los que conocen Boeing consideran que fue un error abandonar Seattle, en el estado de Washington, cuna de la compañÃa. El edificio de Chicago llevaba tiempo casi abandonado, dado que en la ciudad no hay más que burócratas a quienes se les habÃa permitido trabajar a distancia.
Ahora mismo, el máximo responsable de la compañÃa vive en Carolina del Sur, donde está la fábrica del 787, porque quiere ver cómo este avión vuelve a ser fabricado.
Como reveló REPORTUR.mx, Boeing fabrica fabrica el último Jumbo luego de 52 años de su primer vuelo. Aunque Boeing con el 747 marcó una época transportando pasajeros y últimamente dedicado a carga, estos llegan a su fin. La compañÃa solo fabricará otros cuatro aviones más para la aerolÃnea de carga Atlas Air, como el pedido final (Boeing fabrica el último Jumbo y Airbus acaba su primer A321XLR).