Dieciséis personas han fallecido al estrellarse un avión en la región rusa de Tatarstán. Otros seis pasajeros han sido trasladados al hospital y se encuentran en estado grave.
El avión L-410 transportaba 20 paracaidistas y dos tripulantes. Las autoridades informaron que los pilotos alertaron de un fallo en el motor a 70 metros de altura e intentaron un aterrizaje de emergencia cerca de la ciudad de Menzelinsk.
De acuerdo con medios locales, el piloto intentó realizar una maniobra para evitar un área con pendientes. Sin embargo, el ala del avión golpeó a un vehículo Gazelle durante el aterrizaje.