La audiencia pública convocada por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) -que trajo aparejada la suspensión y demora de más de cuarenta vuelos por medidas sindicales- oficializó el pedido de hasta 503 rutas nacionales e internacionales a explotar.
Las exposiciones centrales, en condiciones de volar de inmediato, fueron de Norwegian y Avian, la subsidiaria de la colombiana Avianca. La primera «blanqueó» que apunta a operar 155 itinerarios desde un total de 90 aeropuertos distribuidos entre Argentina, la región y el resto del mundo. La estrategia local de la europea contempla la creación de hasta 3.200 puestos de trabajo en un lapso de cinco a ocho años, según publica Iprofesional.
Otra de las compañías que expuso su estrategia fue Buenos Aires International Airlines. La empresa Polar, por su parte, procurará combinar prestaciones de pasajeros y carga.
Royal Class es otra de las que se presentó en la audiencia pública. A través de Just Flight, solicitó el manejo de 10 itinerarios. SAPSA solicitó 41 rutas, entre ellas varias internacionales. Otra compañía que busca incursionar en el escenario aerocomercial es Servicios y Emprendimientos Aeronáuticos (SEA). La firma cuenta con experiencia en el manejo de taxis aéreos y pidió explotar vuelos no regulares a definir.
El último nombre de quienes presentaron sus planes de negocios corresponde a ArgenJet. La firma no exigió rutas específicas pero sí solicitó «autorización para explotar servicios no regulares internos e internacionales de carga exclusiva utilizando aeronaves de gran porte Boeing 727-200F Cargo».
El incremento en el número de actores que pretenden marcar el paso en el mapa de vuelos de la Argentina deja en evidencia que, aunque resta conocer detalles de la operatoria , que el nicho aerocomercial lidera las preferencias de una masa de inversores en continua expansión.