A pesar de que se está fortaleciendo su negocio, la reputación de Avianca ha sido golpeada este año por los traumatismos en la operación causados por factores como los conflictos laborales con sus pilotos y la cancelación inesperada de vuelos.
La pregunta que surge hoy es si segunda aerolínea más antigua del mundo -todavía en operación- está pasando por una crisis de éxito.
Las noticias del desempeño en los últimos años dan muestra de una compañía que crece y se fortalece en su camino para convertirse en la más grande del continente en su sector. Hace cerca de un mes anunció la entrada de su acción para ser negociada en Wall Street, después de dos años de haber empezado su camino en la Bolsa de Valores de Colombia; en el primer semestre de este año su filial en el país reportó un crecimiento de 9,6 por ciento en sus ingresos operacionales, así como un incremento de 13,1 en el número de pasajeros transportados entre enero y junio comparado con 2012.
Pero con la crisis operacional que tuvo Avianca el jueves y viernes de la semana que termina y el consecuente golpe que esto tiene sobre la reputación de la marca, ese crecimiento se puede poner en riesgo (por lo menos en el país), más cuando competidores como LAN Colombia han manifestado que quieren morder un pedazo grande de la torta nacional de la que Avianca tiene 57 por ciento, informa La República.
En la mañana del viernes más de 200 pasajeros protestaban porque llevaban más de 12, 14 y hasta 18 horas esperando en el Puente Aéreo para viajar a sus destinos, pues el día anterior se había cerrado el aeropuerto por factores meteorológicos. Lo grave de la situación es que muchos manifestaron haber tenido que pasar la noche en la terminal, sin ser transportados a hoteles ni tener respuestas claras sobre la situación. Desde las 7 a.m. la ministra de Transporte, Cecilia Álvarez, se presentó en el lugar y habló en radio nacional pidiendo la presencia del presidente de Avianca, Fabio Villegas.
A su llegada, Villegas empezó a atender personalmente las inquietudes de los usuarios que se agolpaban en la oficina de atención, a quienes les pidió paciencia. “Se nos ha generado un problema de represamiento en la operación como consecuencia del mal tiempo que hemos tenido en Bogotá en los últimos días. Ayer terminó con una circunstancia en el que muchos tiempos de vuelo reglamentario de las tripulaciones se vencieron y muchos de los vuelos de la noche tuvieron que ser cancelados”, dijo.
El director de la Aeronáutica Civil, Santiago Castro, aseguró que se trabajaría con la compañía en la pronta solución del represamiento de ese momento, y que posteriormente se adelantarán las investigaciones caso por caso para establecer las responsabilidades y las sanciones a las que haya lugar.