Deja un comentario El tan solicitado asunto de la preinternación para los viajeros de Estados Unidos que arriban a aeropuertos mexicanos se sigue discutiendo, pero en tanto los hoteleros de Quintana Roo y otras entidades lo promueven desde hace tiempo, el empresario Eduardo Sánchez Navarro y el Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) se oponen, revela Dinero.
Este proceso tenía como principal obstáculo la portación de armas de los agentes de Estados Unidos en los aeropuertos mexicanos, que ya la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de la reforma a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, para establecer la posibilidad de otorgar permisos de portación de armas a funcionarios extranjeros de migración y de aduanas, que participen en la revisión migratoria en territorio mexicano.
Sin embargo, al tratar de implementar el plan, resultó que los costos serán más altos de los previstos.
Recién informamos que mil millones de dólares anuales sumaría Cancún si se activa el programa de pre internación en el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), que daría pie a ser el Hub de Sudamérica, afirmó Jesús Almaguer Salazar, director general de la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC). Por lo que el sector empresarial turístico de la entidad impulsa este proyecto.
Quienes, en reciente reunión con la entonces secretaria de turismo, Claudia Ruiz Massieu, se mostraron contrarios al proyecto, fueron Eduardo Sánchez Navarro y el Grupo Aeroportuario del Pacífico, ya que tendrían que invertir muchos millones de dólares en una infraestructura que argumentan no será rentable.
De igual forma, en una encuentro entre la subsecretaria de Transporte, Yuriria Mascott, y los miembros de la Cámara Nacional del Aerotransporte (Canaero), se planteó que si se hace el programa piloto para este proceso, las plazas propuestas ahora serían Toluca y Cancún.
Yuriria Mascott también destacó que los costos de serán mayores a lo que se ha considerado hasta ahora, pues, además, habrá que sumar todo lo que provocará a nivel de operaciones y servicio a los aparatos, contar con una terminal estéril.
Asimismo, todavía Estados Unidos tiene que aprobar que las zonas pilotos sean Toluca y Cancún, pues se ha destacado que las autoridades estadounidenses se han inclinado por Los Cabos.
Empero, los tiempos de espera en el segundo aeropuerto más importante del país, sigue siendo un tema, en enero de este año informamos que interminables filas de hasta 2 horas tuvieron que sufrir turistas a su llegada a Cancún ante la inoperancia de los servicios de aduana, tanto para nacionales y extranjeros, que llegaban con ilusión a Cancún para pasar sus vacaciones invernales.
