Airbnb ha informado que, desde 2017 hasta el cierre de 2024, ha retenido y pagado más de mil millones de pesos (50 millones de dólares) en Impuesto sobre el Hospedaje (ISH) en Quintana Roo. La cantidad fue entregada a la Secretaría de Finanzas y Planeación del estado en nombre de los anfitriones que operan dentro de la plataforma.
El ISH es un impuesto local aplicable a los servicios de alojamiento en las entidades federativas. Airbnb participa en la recaudación y remisión de este impuesto, conforme a la legislación estatal. Quintana Roo se ha convertido en una de las entidades con mayor captación de este recurso.
Así mismo, Airbnb ha comunicado su compromiso con el cumplimiento fiscal. Según Ángel Terral, director general de Airbnb para México, Centroamérica y el Caribe, la empresa busca colaborar con las autoridades para que la comunidad de anfitriones cumpla con sus obligaciones fiscales.
Los impuestos representan una fuente importante de recursos para los gobiernos estatales. Estos fondos se destinan a funciones y labores que buscan garantizar derechos y fomentar el desarrollo en la región. La participación de Airbnb en este proceso genera un impacto económico en Quintana Roo.
Airbnb inició operaciones en 2007, cuando dos anfitriones en San Francisco recibieron a tres huéspedes en su vivienda. Desde entonces, la plataforma ha crecido hasta contar con más de cinco millones de anfitriones y ha recibido a más de 1.500 millones de huéspedes en diversos países.
Los anfitriones de Airbnb ofrecen tanto estadías como experiencias que permiten a los viajeros conocer las comunidades de manera directa. La plataforma se ha convertido en una alternativa relevante dentro del sector turístico y económico de Quintana Roo.
Como lo informó REPORTUR.mx, de acuerdo con Francisco Madrid Flores, director de la consultora Starc en Cancún, señaló que el estudio sobre el impacto de las plataformas como Airbnb reflejó que un anfitrión cuenta con 2.7 unidades en promedio, por lo que ya no sería un autoempleo o una economía colaborativa. (Enfado en QRoo: el anfitrión de Airbnb tiene 2.7 unidades de media).
Pregunta. ¿Y en manos de quién queda ese dinerito? ¿Si será que algún día el pueblo verá algo de éste? O como es de esperarse, quedará en los bolsillos de unos pocos rufianes.