La pericia de la tripulación ha evitado la colisión entre dos aviones en el aeropuerto de Midway, en Chicago. Como se puede ver en las imágenes, un jet privado aparece en la pista en la que un Boeing 737-800 de Southwest estaba aterrizando.
El piloto del segundo logra abortar in extremis el aterrizaje, levantando el vuelo antes de impactar con el jet. Ambas aeronaves llegaron a estar a 800 metros de distancia.
Según las primeras investigaciones de la Administración Federal de Aviación (FAA), todo apunta a que el jet privado no atendió las indicaciones de los controladores aéreos, que le habían denegado el acceso a la pista.