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El municipio de Tulum, uno de los más cotizados para la inversión inmobiliaria, es el que presenta la tasa más alta de estafas en la entidad, por encima incluso de otros destinos como Cancún y Playa del Carmen, informó la Asociación Nacional de Abogados de Empresas del Colegio Inmobiliario (ANADE).
De acuerdo con Estrella Ríos, presidenta de ANADE en Quintana Roo, en la actualidad en dicha demarcación 7 de cada 10 desarrolladores sufren de algún conflicto legal, debido a que construyeron aún con la falta de permisos, en terrenos sin testificar, entre otros problemas, que generan pérdidas para los compradores o inversionistas.
“Yo diría que hay un claro desconocimiento e ignorancia de las obligaciones que los desarrolladores tienen; además, desafortunadamente muchos desarrolladores han sido víctimas de asesores coyotes que les piden dinero para arreglar un trámite y desaparecen”, comentó Ríos. Por tal razón, destacó la urgencia de implementar una campaña de concientización hacia las empresas y desarrolladores para combatir estas irregularidades.
“La burbuja inmobiliaria (de Tulum) está colapsando, hace tres años se empezó a vender muy bien a precios muy altos porque había una especulación en el valor del metro cuadrado, pero ante estos retos que enfrentan los desarrolladores, el panorama ha cambiado”, afirmó la presidenta de ANADE.
Como lo informó REPORTUR.mx, alertaban en agosto por los fraudes inmobiliarios en Cancún, pues preocupa porque afecta la imagen del destino. En tal sentido, Patricia Mora, presidenta de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en esta ciudad, lamentaba en su momento, que se generalice, ya que la mayoría de las empresas desarrolladoras están haciendo bien las cosas. (Alerta en Cancún por fraudes inmobiliarios que afectan su imagen).
Ya se veía venir hace mucho tiempo. Tulúm se volvió un pueblo de drogadictos, lavaperros, dealers y estafadores, empezando por el gobierno que vendió todas las playas y dejó a los turistas del centro sin playas públicas, se roban el dinero de los impuestos y no arreglan la calle Bocapaila de los hoteles que es un total desmadre y cagadero. A esto súmele la estafa de los taxistas con sus tarifas absurdas y super infladas que son a diario quienes te cobran más de mil pesos por 1km de distancia.