El pasado domingo, en un vuelo de Cancún a México, el piloto de un avión de Magnicharters con 128 pasajeros a bordo, no sólo invitó a cabina a la actriz Esmeralda Ugalde, sino que le cedió el mando de la aeronave; el testimonio fue subido a las cuentas de redes sociales de la joven, tanto en fotografía como en video, por lo que el piloto fue cesado de su cargo.
El capitán Jorge Badía, director general adjunto de Magnicharters, aseguró que el capitán que permitió el acceso a la actriz y a su amiga a la cabina, perdió el empleo.