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Las aerolíneas estadounidenses Jetblue y Spirit no logran los permisos para fusionarse, por lo que dan fin a su acuerdo de 3.800 millones de dólares. Con esto, Jetblue pagará a Spirit la multa de la cancelación del contrato por 69 millones de dólares.
Jetblue ya había hecho pagos anticipados a los accionistas de Spirit por 425 millones de dólares, que hicieron parte de la negociación que habían planeado y que finalmente en enero fue bloqueada por el tribunal federal.
Las dos compañías aéreas ya habían acudido a la apelación del fallo y estaban a la espera de la audiencia en el tribunal de circuito para junio. Sin embargo, las aerolíneas son consideran que si bien es una fusión en beneficio de los consumidores, dudan que puedan recibir la aprobación regulatoria antes de la fecha de terminación de su acuerdo que es el 24 de julio.
Como lo informó REPORTUR.us, en enero Jetblue recibió un nuevo golpe tras la suspensión de la alianza con American, pues un juez federal de Estados Unidos le bloqueó la compra de Spirit al considerar que la fusión violaba ley de competencia. La decisión, tomada por el juez William G. Young. (Nuevo golpe a Jetblue: un juez le bloquea la compra de Spirit).
En un comunicado, Jetblue y Spirit manifestaron en ese momento su desacuerdo con el fallo del Tribunal de Distrito de Estados Unidos. Aseguraban que su fusión sería la oportunidad de incrementar la competencia para ofrecer tarifas bajas, además de un buen servicio en varios mercados y así poder hacer contrapeso a las grandes aerolíneas estadounidenses como United, American, Delta y Southwest.
