Para América Latina las inversiones españolas en el sector turísticos han sido fundamentales de cara al desarrollo de una industria que ha repartido riqueza entre los ciudadanos de los países donde han aterrizado los capitales. Las autoridades así lo han entendido, y lo han transmitido en los diversos encuentros auspiciados por la Corona de los Borbones con empresarios españoles. Por ejemplo, durante la última Fitur, el gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, refrendó su compromiso con los inversionistas españoles, a quienes agradeció su preferencia por México, especialmente por Quintana Roo, y les garantizó seguridad y certidumbre para sus inversiones. Borge Angulo saludó entonces al todavía príncipe Felipe de Borbón, y para la próxima visita oficial de Enrique Peña Nieto a Madrid se espera un encuentro con hoteleros españoles, como el presidente de Meliá, Gabriel Escarrer. Tradicionalmente estas citas han tenido como anfitriones a los monarcas españoles, con la presencia habitual de otros grandes hoteleros como Carmen Riu, Simón Pedro Barceló o Miguel Fluxá. El futuro Rey Felipe VI ha demostrado tener consciencia de lo que desde su cargo puede aportar al turismo, y es de prever por tanto que siga dando preferencia a América Latina y a su industria turística.