La emergencia por la pandemia Covid-19 ha puesto en grave riesgo a las aerolíneas como es el caso de la colombiana Easyfly que ya proyecta pérdidas por más de $30.000 millones a mayo, por lo que va a cancelar rutas y frecuencias y otras medidas como la cancelación de contratos de empleados y la suspensión de compra de aviones.
“La situación es bastante grave. En marzo perdimos $10.000 millones y en abril vamos a perder otros $12.000 millones. Suspendimos los contratos de trabajo de todos los empleados, por lo que no pagamos nómina y también logramos algunos acuerdos con algunos arrendadores de aviones para suspender el pago. La situación a abril es una pérdida de $20.000 millones y, en mayo, acumularíamos unos $30.000 millones”, dijo Alfonso Ávila, presidente de Easyfly en entrevista con La República.
Pero además, el panorama no es muy alentador, con el cierre de los vuelos nacionales e internacionales hasta finales de mayo, según lo anunció el Gobierno, se suma el temor que tendrán los pasajeros a la hora de volver a viajar. “Consideramos dos razones por las que el tráfico va a disminuir. La primera es que los pasajeros van a tener miedo de viajar en avión por el temor a enfermarse de Covid-19. La otra es que se va a presentar una recesión importante y la capacidad adquisitiva de los viajeros va a disminuir. Creemos que el tráfico nuestro se va a caer 40% durante lo que queda de 2020”, comentó al mismo medio Ávila. (EasyFly: “Un modelo de negocio ganador a prueba de dificultades”).
Por otra parte, la aerolínea tomará algunas medidas como la reducción de algunas frecuencias y la cancelación de la operación de las bases de Popayán, Cartagena, Barranca y Valledupar, ya que consideran que son rutas que no alcanzarán punto de equilibrio. Pero además la aerolínea ha tenido que suspender contratos de los empleados, ha solicitado apoyo a sus proveedores y ha suspendido la compra de aviones. “Nosotros teníamos proyectado aumentar nuestra operación de 30%. Para esto necesitábamos cuatro aviones adicionales. Ese pedido lo suspendimos y la negociación de contratos con algunos arrendadores de aviones”, explicó Ávila.
La aerolínea tenía previsto para este año un crecimiento de 30%, es decir, 216.000 pasajeros al mes pero ahora estima que serán 120.000 pasajeros mensuales, por esto, solicita al Gobierno respaldo, porque las líneas de créditos con Bancoldex son de máximo $5.000 millones y para las aerolíneas es insuficiente.
Sin embargo, Ávila valora el esfuerzo del Gobierno con medidas como la baja del IVA al 5% en el valor de los tiquetes, esto para incentivar al pasajero, pero no soluciona las pérdidas de las aerolíneas. Igualmente, estima que la recuperación del sector aéreo será muy lenta. “Yo creo que se va a demorar por lo menos un año. Por dos razones, temor a volar y el ingreso de los colombianos va a quedar muy deteriorado”, señaló a LR Ávila.