Claudio Altieri, director de Nuevos Negocios para Latinoamérica de Amadeus, destacó que todo se está haciendo más inteligente en la industria de los viajes, y parte de esta industria son los hoteles, los cuales están aprovechando las tendencias tecnológicas para crear mejores y más inteligentes experiencias en sus huéspedes.
Con más de 4.77 mil millones de usuarios de teléfonos móviles estimados en todo el mundo en 2017 y 350 mil millones de mensajes de texto mensuales, el crecimiento móvil se está convirtiendo rápidamente en la mayor tendencia en los hoteles. Muchas personas ahora prefieren mandar un mensaje de texto que llamar, por lo que los hoteles están implementando servicios de mensajería para que los huéspedes puedan enviar mensajes a la recepción o al conserje, con su solicitud específica.
La asociación con Zingle, por ejemplo, está revolucionando las comunicaciones con los huéspedes y su experiencia en este sentido.
Los viajeros podrán enviar mensajes de texto al personal del hotel directamente, sin necesidad de descargar una aplicación, haciendo solicitudes de forma fácil y rápida. Éstos pueden simplemente mandar un mensaje de texto cuando requieran servicio de habitación, cuando su televisión no esté funcionando, o cuando quieran toallas limpias. Cuantos más huéspedes se sientan cómodos con mandar mensajes de texto al hotel para sus necesidades, el compromiso entre éstos y el personal del hotel aumentará – lo que en última instancia, resulta en un mayor nivel general de satisfacción de toda la experiencia hotelera.
Además, con las configuraciones adecuadas habilitadas, los huéspedes también podrán solicitar servicios de comida a la habitación por medio de sus móviles y tenerlos en su habitación en el momento en que lleguen al hotel. Cuando hayan terminado, podrán simplemente dejar la bandeja fuera de su puerta con la confianza de que el servicio de limpieza la recogerá inmediatamente – ya que ésta tiene un pequeño sensor que identifica cuando se encuentra afuera de la habitación. Este sensor envía una notificación a la limpieza, aliviando la imagen desagradable de un pasillo lleno de bandejas.
Hay más posibilidades: incluso las toallas podrían ser rastreadas. Mediante la tecnología de identificación por radio frecuencia (RFID), los hoteles pueden rastrear el paradero de las toallas. El chip es leído por los sensores en la habitación del hotel, y puede ser utilizado por la limpieza para ver si es necesario el reabastecimiento de toallas. El hotel puede medir la frecuencia con que un huésped quisiera que su habitación fuera atendida sin preguntarles. El seguimiento en tiempo real de los servicios de limpieza significa que usted puede hacer el ingreso a su habitación en forma más rápida y por lo tanto, los hoteleros cosecharán recompensas en la satisfacción de los huéspedes.