1 comentario La familia Cosío, propietaria de la cadena Las Brisas, contrató al ex alcalde de Cancún, Julián Ricalde, según lazaron, como parte de su equipo de abogados en el caso que les enfrenta a la familia Riu por el hotel que los españoles, los que más cuartos de sol y playa tienen en México, planean construir en Nizuc en una parcela pegada a su establecimiento.
El pasado abril, REPORTUR.mx informaba que Antonio Cosío Pando, vicepresidente del Grupo Hotelero Brisas, le había enviado una carta a Claudia Ruiz Massieu, entonces secretaria de Turismo, donde le detallaba su preocupación por la edificación de un hotel de Riu, que dañaría su inversión de más de 170 mdd hecha en 2013 para el hotel Nizuc Resort & Spa y que ha posicionado a la zona de Nizuc en Cancún para el segmento de lujo (Los planes de Riu en Nizuc preocupan a la familia Cosío).
Los terrenos en medio de la polémica eran de los hermanos Becker, quienes le vendieron uno de los predios a la familia Cosío y el otro a la familia Riu bajo parámetros de ordenamiento urbano que regían en el momento de la transacción, y fueron los Cosío quienes apostaron por la construcción de un hotel que resultaba diferente a la oferta hotelera existente en Cancún en ese momento, optaron por un hotel de lujo, segmentado al turismo Premium y de Plan Europeo.
El Plan de Desarrollo Urbano de Cancún se modificó primero en la administración que encabezó el perredista Julián Ricalde, pero fue rechazado tras el cambio de gobierno, con el priísta Paul Carrillo como alcalde. Se replanteó porque se quiso evitar una sobre densificación de llaves hoteleras que venían en el plan previamente aprobado.
En el PDU que está vigente, sí se aprobó un crecimiento de la oferta hotelera en Cancún y Puerto Morelos, que podría incrementar su oferta en un treinta por ciento en los próximos años. Uno de los predios que tiene mayor densidad con el PDU vigente, precisamente es el de la familia Riu, quienes vienen tratando de construir ahí un hotel de más de quinientas habitaciones en un edificio de quince pisos, en una cadena con un cliente que paga de media 100 dólares por noche en todo incluido, frente a los cerca de 400 dólares que ahora cobra Brisas en Nizuc.
Y así es como se revientan los destinos… Que pena que no se entienda otra forma de negocio que la masa y los bajos precios!